Hoy quisiera herirte tanto como tú me has herido, pero no
tengo las armas, ni las fuerzas y sobre todo, no tengo tan poco clase como para
rebajarme a donde andas tú. Empiezo a
creer que todo este tiempo siempre fuiste el tipo que hoy se sienta frente a
mí; Un perfecto desconocido que ha dañado más de lo que yo creí que había por
dañar en mi ser. Te deseo tanto mal. Eres un niño y me hubiera gustado, soñé
tantas veces con que algún día fueras un hombre. Por ende, como buen chiquillo
vas andando con la mirada hacía el piso recogiendo cualquier porquería que
encuentras por ahí. Es cierto, a veces no todo lo que anda tirado resulta ser
una porquería, pero vaya que tú si tienes un ojo conocedor para escoger de lo
peor. Supongo que conmigo esa visión te falló, pues conseguiste más de lo que
tú mismo pudiste creer merecer. Pero, bueno hoy lo has perdido. Ay nene, quizá
habría que volver a la escuela para enseñarte que todo lo que uno hace tiene
siempre sus consecuencias. Qué pena que la cobardía se te dé tan bien. En tus
ojos que se llenan de lágrimas al ver que “la mujer de tu vida” se te va, sólo
puedo recalcar, que sí se va, va saliendo por la puerta grande como toda una
reina que siempre trabajó por lo mejor y construyó lo que ahora tú destruyes. Ni cincuenta ingenieros pueden reconstruir el palacio
que ella edificó… para dos. Mucho menos tú con tu desidia y poco compromiso
podrás ser capaz de levantar una piedra. Buena suerte, ahora estás solo. Aunque
a tu reina - porque “princesa” ¿tuya? Nunca más - el amor no se le esfume como
la confianza, el tiempo premia. Todo aquello que propones resolver con un beso,
quizá para tu dama, no tiene solución. No la culpes de sus arrebatos, tus
frases hechas y el tonto amor son traicioneros y confusos. Un te amo, no es un
te quiero a mi lado.
Sígueme, si te gusta mi blog :)
La frase suelta del Día
Ríe todo lo que quieras, no por enamorar a alguien. Si no para que sepa que eres feliz y no lo necesitas.
Mostrando las entradas con la etiqueta confianza. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta confianza. Mostrar todas las entradas
31.10.12
Quisiera saber.
Si hay algo ahí, quisiera saber qué es... Si fuera amor, sería un enorme comienzo, sin embargo, las caídas, burlas, borracheras y ahogos en llanto, me han enseñado que el AMOR no es suficiente para ser dos igual a uno. El amor no hace la relación, el amor no hace la pareja. Primer punto clave, perfectamente claro.
Quisiera saber qué quieres, qué buscas... más allá de tu sonrisa de "pobre inocente", no sé exactamente que es lo que hay. Tú no eres más, no eres menos, eres tal cual que esos lobitos con piel de cordero, dime que te hace diferente.
A estas alturas, tengo las rodillas raspadas. Las caídas no son en vano, ya llevo rodilleras, coderas y un buen casco que me protegen de tus malas intenciones, pero aun no encuentro el artificio ideal para cubrir mi corazón de tus endulzantes palabras y de tus frases hechas. Porque cuando el corazón es estafado, el casco sólo es un lindo adorno, como los cuernos. Y las rodilleras no sirven. El piso duele y las heridas cada vez se hacen más profundas. Los oídos sordos y los ojos ciegos, todos ven y todos oyen lo que tú ni sospechas.
Etiquetas:
agresividad,
confianza,
defectos,
hombres,
INFIDELIDAD,
mentiras,
mujeres
30.4.12
EL VIAJECITO
Hombres ebrios con amigos pendejos es algo parecido al dicho sexista que dice "mujer al volante, peligro constante", si lo cambiamos un poco y adecuamos al contexto quedaría una cosa como "Amigo que embriagan, flaca que agarra".
Hace una par de días mi novio me salió con una cosa alucinante. Realmente, su ocurrencia fue tal que me ocasionó una crisis de Drama Queen. El patita me salió con que tenía planes muy entretenidos para vacaciones de medio año. Me dijo una cosa como esta: "Amorcito, con mis brothers estamos pensando irnos de viaje por TRES SEMANAS en Julio".
Mi respuesta inmediata e involuntaria: ¡¿QUÉEEEE?!
No hay forma, ni poder sobre esta tierra que permita que tome tal cosa con una sonrisa y satisfacción, sería como decirle: "Si, mi amor, golpéame"
Creo que la base de una relación es la CONFIANZA, pero si tienes a cuatro idiotas conspirando para que tu gordo sea un "MACHO QUE SE RESPETA se agarra flacas en su viaje de patas" creo que sería un poco iluso decir: "No, yo confío en mi GORDO plenamente y sé que el jamás se comportará como sus amigos".
"Mujer precavida, vale por dos"
"Guerra avisada, no mata gente"
La CONFIANZA es la base de la relación. ¿Hasta que punto podemos considerar que un espacio es estable para vendarnos los ojitos y creer plenamente en el raciocinio de nuestro muchacho? No lo sé, es difícil saberlo, solo se siente, solo se intuye.
Y si mi intuición no me falla....
La ecuación:
(AMIGOS PENDEJOS * LITROS DE CERVEZA) + CALZONES LIGEROS = X
Donde "x" es "Potencialmente infiel", "Potencialmente muerto", "Potencialmente winner man", "Potencialmente NO LO PERMITIRÉ"
Solución planteada por mi, ante dicha circunstancia:
No soy quien para prohibir algo a mi flaco, pero nadie dijo nada acerca de las ADVERTENCIAS.
"Ok, ¿quieres ir? Si vas, te vas SOLTERO"
No es una cuestión de egoísmo, de celos, etc. Nadie toma un vaso de una botella con etiqueta de "PELIGRO".
Etiquetas:
alcohol,
amistad,
amor,
confianza,
defectos,
discusión,
hombres,
INFIDELIDAD,
machoqueserespeta,
relación,
rompimiento
1.11.11
Desconcertada
DE DESCONCERTADA
"Hola, estoy muy triste. Acabo de descubrir que mi pareja me engaña. Yo tengo 21 años y el es mayor por unos años. Me enteré que está saliendo con una cualquiera de 17 años. No son rumores estoy segurísima, yo misma escuché cuando ella lo llamo. No le dije que sabía, solo invente un pretexto para salir corriendo de su casa. Estoy desconcertada, no quiero hablarlo con ninguna de mis amigas, porque todas me dirán que es un idiota. Y aunque se que lo merece no quiero escucharlo.No sé que hacer, llevamos juntos algo de tiempo y lo amo de verdad. Me estoy muriendo."
RPTA
Creo que lo primero que debes hacer es enfrentarlo y decirle lo que sabes; si estás segura y no son solo rumores, mantente firme en tu postura porque lo más seguro es que él trate de convencerte de lo contrario. Y, cuando uno está enamorada, puede cegarse al punto de creer en las mentiras más absurdas. Creo que recalcas la edad porque te parece un poco absurdo que un chico de más de 21 años busque a una chica de 17, pero no lo es. Los hombres buscan niñas por dos razones: La primera, porque son un poco más ingenuas y fáciles de manipular. La segunda, porque no se sienten con la madurez necesaria para conquistar a una chica de su edad. Toma una decisión en base a tus principios y tus sentimientos. Debes preguntarte, cuál es tu límite para perdonar.
Escribe a atencion_fc@hotmail.com
Escribe a atencion_fc@hotmail.com
9.10.11
Efímero
Lucía andaba de Shopping un viernes por la tarde buscando un
vestido para una fiesta. Entonces se encuentra con Sergio, su ex. Tuvo una
relación corta con él, que terminó por mentiras. Sin embargo, hay estaba él, el
mismo chico que le encantaba en su primer año de la Universidad, sólo que tres
años más maduro. Perdió todo contacto con él, pues luego de terminar, se dio
cuenta que la arquitectura no era lo suyo y decidió cambiarse a otra universidad
para estudiar Publicidad.
Él la reconoce de inmediato y se acerca a saludarla.
–Lucía, que bonita estás.
–Lucía, que bonita estás.
Al verlo se quedó helada, quiere salir con él, pero no se atreve a invitarlo a salir. Cómo si le hubiera leído la mente, Sergio le propone cenar. Dilema: Lucía tiene la fiesta del siglo hoy en la noche. A pesar de eso, acepta. Realmente la había impresionado. En la mente de ella, ya había soñado con que la relación podría resurgir.
El lugar, lujosísimo. Sergio ha cambiado mucho. Ya no es el mismo chiquito inmaduro, ahora trabaja, tiene un buen auto y parece tomar las cosas más en serio. Después de mucho hablar, él le roba un beso.
-Princesa, verte de nuevo ha sido más de lo que esperaba.
Quiero comenzar de nuevo contigo.
Habían terminado muy mal, pero esos eran otros tiempos. Ella
también pensaba que ese encuentro había sido maravilloso. Después de ese día
empezaron a salir y a verse más seguido. Lucía pensaba que esta vez todo era
definitivo. Una noche en la que todo parecía ser maravilloso, Sergio le hizo
muchas promesas a Lucía y ella se entregó por completo. Esa noche la dejó en la
puerta de su casa y se despidieron con un beso enorme, como acostumbra a
dárselo Sergio desde hace cuatro meses. Algo
cambió. Después de esa noche, él no
contestó más llamadas.
Ella no sabía cómo ubicarlo. Había prometido llevarla a casa
y presentarla ante sus padres, pero nunca antes ella había conocido ese lugar.
No tenía idea de cómo saber de él. En el facebook, no había nada nuevo de su
vida, nunca se conectaba. Su desesperación por saber algo de él era demasiada.
En una visita a su perfil, leyó el comentario de un tipo. Parecía ser muy
cercano a Sergio, tenían fotos juntos, muchas publicaciones donde se les
vinculaba.
Lucía le envía un mensaje:
Lucía le envía un mensaje:
“Hola, cómo verás, me llamo Lucía. No sé si sepas, pero
estoy o estuve saliendo con tu amgio Sergio y de repente no supe más de él.
Necesito que si sabes algo de él me lo digas. Adiós, cuídate.”
La mañana siguiente, la despierta el teléfono. Era un número desconocido.
-Alo
-Lucía, soy Sergio. Necesitamos hablar.
Antes de que ella pudiera reclamar algo, Sergio le dio un lugar, una hora y colgó.
“Hola Lucía, por favor siéntate y escúchame. Él día que nos
encontramos en el Mall yo había ido a solucionar un problema. Cuando te vi,
reviví muchas cosas que sentía por ti, te vi más grande, más linda y tuve ganas
de quedarme contigo. Lamento que haya sido muy tarde. Carla: Así se llama mi
esposa. –Le enseñó el anillo- Me casé por eso dejé de buscarte, porque fuiste
una maravillosa tentación, pero no puedo desmoronar todo lo que he construido
por ti, por un encuentro fugaz. En el Mall, la lista de novios estaba mal. Los
apellidos no estaba bien escritos, de no haber sido por eso, quizá no
estaríamos aquí, sentados frente a frente. “
24.10.10
Palabras vacías
Se ha vuelto mecánico el acto de decir sin creer y de actuar sin sentir. ¿Por qué? Frivolidad, tal vez; algunos lo llaman supervivencia. Está claro que en este bosque de cemento hay muchas bestias que se esconden bajo pieles de cordero, que esperan el primer descuido para abordarnos con su ponsoña. Sin embargo, no podemos vivir siempre a la defensiva, porque como todo en esta vida, lo que se maquiniza se transforma en inconsciente e involuntario. No es posible esclavizar a nuestro corazón a ser y sentir como nos gustaría o como deberíamos. Tan robóticos nos hemos vuelto, que somos capaces de decir te quiero sin sentir amor.
Bienvenidos a una sociedad globalizada, donde la gente sonrié y por dentro le hierbe la sangre. Donde los hombres prometen como bancos; son contratos con letras pequeñas en las que dice: "todo lo antes mencionado, es mentira". ¿Qué tan posible es creer ciegamente en ellos? Esperar demasiado y recibir muy poco se ha vueto cotidiano par nosotras.
2.9.10
A R P í A S
¿Cuán malvadas podemos ser cuando nos sentimos dolidas? ¿Cuán capaces de hacer escarnio de las tragedias ajenas podemos ser? ¿Cuán satisfactorio resulta ser la odiosa que disparó a matar? Una mujer dolida es de temer, una mujer lastimada y con sed de venganza es una ARPÍA.
La confianza no es infinita y se talla a la medida de quien se ama, de quien se conoce y de quien nos lastima. Hay quienes hieren e involucran a terceros en el caótico asunto, en ese momento, el drama se vuelve más telenovelezco. Es la maldita realidad de un príncipe que se pasea en un "BMW", que se jacta de ser un gran partido y después de sus desplantes, caí en la cuenta que no es más que un niño, temeroso, voluble, inmaduro. La plebeya se enamoró locamente, lo adoró, lo admiró y lo presumió; hay que aceptarlo, el chico era digno de alardes; sin embargo, ella se equivocó, los errores nos humanizan, pero él no quería ser más humano, él quería ser perfecto. Como en su reino empresarial, las fallas se corrigen, lo que falla no sirve y lo que no sirve se desecha. El asqueroso robot se arrancó el corazón de las entrañas y se olvidó de sentir. Sistematizado y poco interesante, se convirtió en un bodrio. Reemplazó una compañera amorosa por una oportunista que esperaba el momento para adueñarse del puesto; es exactamente como se le puede llamar a la “otra”. La que hace el mal tercio se infiltró, aprovechó el momento, aprovechó el enojo, la estupidez, patanería de un miserable y se robó las esperanzas de la protagonista.
Derramé tres lágrimas en tu honor, maldito perro. No pienso regalar más de mi sufrimiento. Me regalaste promesas, pero las promesas son palabras y se pierden en el tiempo. “Todo será como antes, yo te amo a ti, no me importa nadie más”. Como estúpida, creí que lo nuestro renacería, pero no, tú ya estabas por otros lares y yo seguía puesta en ti. Fue una noche como cuando eras mío; horas después, ya eras de otra. No bastó con mi desilusión. La voz de tu nueva “partner” me irrita los oídos, mientras ladra y ladra jactándose de que tú le perteneces y yo me arrastro.
Pobre ilusa que se atraganta ensalsándose de ser tu amor, pobre niña que cree en la sinceridad de tus palabras y en lo lamentable de mi situación. Fue capaz de gritarle en medio de su altanería, que las sobras no las quería porque esas ya las había recogido ella, sí ella, la "otra". La tachaba de arrastrada y sus ánimos se caldeaban; se alteró y terminó por explotar. Se convirtió en poco escrupulosa y muy despreciable.
"Tú te jactas al decir que yo quiero tus sobras, pero las mías tu las recogiste, las barriste del piso, después de que ese, tu amor, me entregara más amor del que nunca te entregará; mientras tu ya te sentías su princesa, el me hacía sentir que era su reina."
Sonaba el teléfono de su habitación, era la "otra", su nuevo amor; paradójico, quien dormía a su lado, era la plebeya que él desecho. Y es que, "ladrón que roba a ladrón tiene cien años de perdón".
Etiquetas:
confianza,
INFIDELIDAD,
mentiras,
mujeres,
relación,
rompimiento
15.6.10
Mentiras
La confianza, ¿qué es la confianza?
La confianza es un privilegio que inconscientemente brindo a las personas que amo, que parecen amarme tanto como yo a ellos y demuestran, aparentemente, una lealtad ininterrumpida e inquebrantable. Confiar me permite sentir que en este mundo caótico puedo creer que hay personas formidables, sinceras y dispuestas a entregarse transparentes ante quienes no hacen más que regalarles todo el amor que tienen para dar. Tú confias porque agradeces que te amo; yo confío porque tu amor se lo merece. Sin embargo, nacen preguntas en mi interior; sí la confianza se rompe, ¿es qué acaso tu amor fue una mentira? sí mis ojos no brillan y resaltan de alegría, sino se inundan mientras observan como se derrumba un corazón creyente, ¿valió la pena amarte y cegarme ante la ilusión de tu verdad? ¿Por qué confiar?
Sus ojos se ahogaban en llanto, mientras él solo atinaba a negar cínicamente todo aquello que lo inculpaba; sus palabras solo trataban de ocultar lo evidente. ¿Qué era lo evidente? Lo ridículo de su mentira. ¿Cómo pudo? Hombres, lamentablemente de esos que caminan tras la manada, tal cual borregos sin criterio alguno; Esos que utilizan el cerebro para construir pretextos, argumentos falaces y frases hechas capaz de enamorarnos, pero, tontos, tontos para improvisar cuando el libreto no escribió sus líneas. De corazón grande y cerebro pequeño, desafortunadamente, esos no nos sirven. Tan extenso ese órgano, capaz de albergar a cuanta incauta aparezca y decline ante una lengua viperina; como dicen en las calles, "ahí hay amor para todas", pero todas no quieren tu amor ni se encuentran dispuestas a regalártelo; Una sola fue capaz de darte todo aquello que pudiste querer, todo aquello que pudiste soñar; patéticamente, nunca fue suficiente.
Ilusamente, nuestra protagonista regalaba besos telefónicos y melodiosos "Buenas noches", acomodaba su almohada, se sumergía en el calor de su cama e iniciaba un sueño de amor. Mientras la brillante luz de la pantalla del celular empezaba a apagarse, el "bello durmiente" guardaba el disfraz de somnoliento bajo las sábanas, mientras se dirigía hacia la puerta con dirección a la vida nocturna, en busca de amor; sí, más amor, porque el de su ingenua niña no era suficiente. ¡Qué ilógico pensamiento! Nunca imaginó que esa niña podría decir adiós sin tentar su corazón; la intuición femenina es un don, eso lo sabemos nosotras, y ellos nunca podrán entenderlo o aceptarlo; la memoria selectiva de una mujer nunca olvida los pretextos de un hombre; el hombre, siempre olvida lo dicho cuando no es cierto; el noctámbulo subestimó la inteligencia de su amada, mintió sin contemplar la posibilidad de que todo en está vida sale a relucir; Nunca imaginó que la ingenua nena no perdonaría su maldita blasfemia; y aunque perdonara, algo murió entre los dos, la confianza.
30.5.10
¿Cuándo mi príncipe, se convirtió en un Sapo?
Hoy, una vez más, se me derrumbó la imagen de la persona que yo consideraba "Él único que nunca me miente". "Él único que se ganó mi confianza total" me acaba de dar una puñalada en mi ridícula ingenuidad; ahora sí, no tengo la menor idea de que debo hacer, porque la fortaleza de mi ser para tomar decisiones, la debilitó este amor que simplemente lastima, daña y me regaló sonrisas que ahora dudo verdaderas. O, tal vez si sé que debo hacer, pero tengo miedo, soy cobarde y no puedo actuar como en papel, como en teoría, funcionan las cosas. Solo siento que un corazón ilusionado fue pisoteado y lo acabo de notar; de esa manera, me pregunto ¿cuántas veces más lo habrán ensuciado sin que él fuera conciente del agravio? Él y yo solo queremos olvidar que el mundo existe, solo queremos creer que el maldito nunca existió; solo nos engañamos más de lo que ya nos han engañado, porque buscamos no seguir sufriendo, pero sufrimos porque sabemos que todo es real.
No quiero entrar en detalles, no quiero describir lo molesto del momento; al respecto, diré que las mentiras lastiman más cuando te rindes a confiar ciegamente en una persona que parece ser real, pero descubres que es distinta. El pasado de quien amo, no me interesa en lo absoluto, pues su presente soy yo, o era; Ese presente comenzó desde el primer día juntos, desde el primer beso compartido, desde el primer te quiero; y tal vez termine, con descubrir los hechos que suceden en un momento de la vida de ese chico en el cual, yo ya era protagonista y también la tristemente célebre estúpida. Aunque tarde, las mentiras siempre salen a la luz; y como una amiga dice: "Hay chicos que están acostumbrados a pedir perdón, en vez de pedir permiso", a lo que yo le contesto: "pero habemos chicas que nos cansamos de perdonar, nos cansamos de hacer borrón y cuenta nueva; porque simplemente, ya se nos acabo el borrador, de corregir tantos errores".
Entonces, aunque tengo la certeza de lo que debo hacer; no puedo seguir el plan al pie de la letra, porque tal teoría no contempla que yo estoy enamorada, triste, desilusionada, pero enamorada; ese manuscrito, lleno de tachas, no contempla que la más dolida ante toda está situación soy yo; la estúpida, la boba, la crédula, la ingenua, la pobrecita. Frente al perro, al pendejo (como ese mismo dice, el que hace las cosas sin que lo descubran); en todo caso, ni tan buen pendejo, porque te descubrí, encontré lo que no quería encontrar; y debo aceptarlo, me dolió; gracias por malgastar tanto amor. No mereces que te dedique las palabras más sinceras dichas directamente por mi corazón: "Te amo". No mereces ni una lágrima de mis ojos que te observaban soñando que es contigo con quien siempre quiero estar; Y lo único que puedo decirte es que "Es mejor decir adiós, antes de mentir a quien ya no quieres más."
2.5.10
El síndrome de la amistad olvidada
Una vez tuve una amiga que era casi una hermana para mi. Disfrutábamos del mayor tiempo posible juntas. Conocía sus más íntimos secretos y ella los míos; parecía ser una amistad de esas que duran para siempre; sin embargo, en el momento menos esperado, llegaron personas valiosas e irremplazables a nuestras vidas; cada una de nosotras vivió posiblemente lo que será el mejor recuerdo de nuestra ingenua adolescencia. Digo "ingenua" porque a pesar de los incansables esfuerzos que hacíamos por demostrar que habíamos vivido en demasía, siempre resaltaba una camuflada inocencia detrás de capas de maquillaje que buscaban ocultar nuestra menuda edad. No aborrezco su dicha, en lo absoluto, en todo momento apoyé sus decisiones a pesar de mis opiniones; es ese el trabajo de una amiga, creo así. Sin embargo, me topé con una amistad que prometió, pero no cumplió, ser eterna, leal, incansable e incondicional.
Una tarde de otoño, alguien se enamoró; por la cercanía de esta persona, su alegría era mi dicha, sentí felicidad por contemplar su entusiasmo, por contemplar cuanto amor irradiaba. Esa persona era mi hermana espiritual, era el primer número de mis llamadas recientes, era el 90% de mis mensajes, era protagonista de mis fotos, era mi compañera de las tardes aburridas en las que solo quieres sentarte y hacer nada, era mi cómplice de travesuras, de maldades, de venganzas, de todo, absolutamente todo. Ahora no es nada, solo es un saludo en el messenger y una pregunta vacía y totalmente desinteresada de ¿cómo estás? a la que respondo cual desconocidas con un "Bien y ¿tú?". Como un huracán, el transcurrir del tiempo se llevó la mano que apretaba la mía para hacerme sentir que estaba presente, dibujó un abismo, una muralla, un cerco perimetral que resguardaba su vida de mi presencia molesta, ese maldito huracán se llevó mis secretos, se llevó mis frustraciones, se llevó mis recuerdos, se llevó a mi amiga.
Sé que el verdadero amor llega en el momento menos pensado y hay que alimentarlo, mantenerlo y cuidarlo; sin embargo, me encuentro confundida al descubrir que hay amores que se esfuman, que se mueren y se reemplazan. Es así, alguien remplazó el grueso de sus amigos, por un amor que presume será eterno. Y es ahí donde me pregunto, ¿El amor y la amistad no pueden ser parte de una relación colateral? Yo pienso que si y trató de ponerlo en práctica, aunque lamentablemente, ya no con los amigos de antes, sino con los pocos que viajan a la par de los años.
A mi corta edad, soy capaz de afirmar que este "síndrome de la amistad olvidada" afecta en mayor porcentaje a mujeres y uno menor a hombres. Y digo, ¡¿Por qué?! ¿Por qué ellos suelen ser más consecuentes en ese aspecto? La verdad no lo sé, pero creo que cuando nos enamoramos, tratamos de dar todo de nosotras; el problema es que a veces, incluimos también nuestro tiempo en su totalidad. Basada en mi experiencia personal, entendí que el peor error que podemos cometer es abandonar a nuestros amigos por la pareja, no negaré que en un inició tropecé de está manera, pero el tiempo me hizo reflexionar y caer en la cuenta de que los amigos son indispensables: una relación, a pesar de prometer la eternidad, suele, de vez en cuando, tener altibajos, no ser del todo comprensiva, no tener oídos para escuchar los aflicciones personales y no hay nada más duro que encontrarse sola en medio de una tempestad. Espero en un futuro encontrarme con aquella vieja amiga y percibir más que palabras vacías en sus oraciones dirigidas hacía mí, espero encontrar a alguien parecido a aquella persona que conocí.
Una tarde de otoño, alguien se enamoró; por la cercanía de esta persona, su alegría era mi dicha, sentí felicidad por contemplar su entusiasmo, por contemplar cuanto amor irradiaba. Esa persona era mi hermana espiritual, era el primer número de mis llamadas recientes, era el 90% de mis mensajes, era protagonista de mis fotos, era mi compañera de las tardes aburridas en las que solo quieres sentarte y hacer nada, era mi cómplice de travesuras, de maldades, de venganzas, de todo, absolutamente todo. Ahora no es nada, solo es un saludo en el messenger y una pregunta vacía y totalmente desinteresada de ¿cómo estás? a la que respondo cual desconocidas con un "Bien y ¿tú?". Como un huracán, el transcurrir del tiempo se llevó la mano que apretaba la mía para hacerme sentir que estaba presente, dibujó un abismo, una muralla, un cerco perimetral que resguardaba su vida de mi presencia molesta, ese maldito huracán se llevó mis secretos, se llevó mis frustraciones, se llevó mis recuerdos, se llevó a mi amiga.
Sé que el verdadero amor llega en el momento menos pensado y hay que alimentarlo, mantenerlo y cuidarlo; sin embargo, me encuentro confundida al descubrir que hay amores que se esfuman, que se mueren y se reemplazan. Es así, alguien remplazó el grueso de sus amigos, por un amor que presume será eterno. Y es ahí donde me pregunto, ¿El amor y la amistad no pueden ser parte de una relación colateral? Yo pienso que si y trató de ponerlo en práctica, aunque lamentablemente, ya no con los amigos de antes, sino con los pocos que viajan a la par de los años.
A mi corta edad, soy capaz de afirmar que este "síndrome de la amistad olvidada" afecta en mayor porcentaje a mujeres y uno menor a hombres. Y digo, ¡¿Por qué?! ¿Por qué ellos suelen ser más consecuentes en ese aspecto? La verdad no lo sé, pero creo que cuando nos enamoramos, tratamos de dar todo de nosotras; el problema es que a veces, incluimos también nuestro tiempo en su totalidad. Basada en mi experiencia personal, entendí que el peor error que podemos cometer es abandonar a nuestros amigos por la pareja, no negaré que en un inició tropecé de está manera, pero el tiempo me hizo reflexionar y caer en la cuenta de que los amigos son indispensables: una relación, a pesar de prometer la eternidad, suele, de vez en cuando, tener altibajos, no ser del todo comprensiva, no tener oídos para escuchar los aflicciones personales y no hay nada más duro que encontrarse sola en medio de una tempestad. Espero en un futuro encontrarme con aquella vieja amiga y percibir más que palabras vacías en sus oraciones dirigidas hacía mí, espero encontrar a alguien parecido a aquella persona que conocí.
2.4.10
Un "adiós" que solo firma de "hasta luego"
"Deja que al cerrar mis ojos, me guíe simplemente por tus palabras de amor teniendo total seguridad de no tropezar con alguna piedra que sobresalga del camino que me lleva a ti, ese camino que yo llamo confianza"
Una relación tormentosa, inundada por la inestabilidad, aunque a pesar de todas las dificultades ambos involucrados decían sentirse plenamente enamorados. Uno, dos, tres rompimientos lastimaron a la pareja en cuestión. Cuando apenas ellos se empezaban a conocer como enamorados, cuando todo parecía ser un sueño, algo los regresó bruscamente a la maldita realidad. Ella descubrió que el niño que pensaba nominar al novio del año, no era más que una pantomima, un personaje mal interpretado, una cara bonita con la conciencia sucia.
PRIMER ROUND
Él muy mal tipo la engañó, pero a pesar de ya ser bastante malo, la situación se ensombreció más para la pobre niña ilusionada de un bodrio de chico, la mujercita (las que lastiman de esa forma, no merecen ser llamadas "mujeres") era nada más y nada menos que amiga de infancia de ella. Creo que un engaño de esas características es el peor golpe anímico para cualquiera de nosotras; es perder a una amiga (el significado que nosotras le damos a la palabra amistad es bastante íntimo y encierra un código de lealtad infinito) y a la vez, al noviecito; los dos, seres que ocupan un lugar importante en nuestros corazones y que al fallarnos también dañan el espacio que les hemos brindado ingenuamente. Ese fue el primer adiós, creo que todas opinamos igual, debió ser definitivo, pero no, solo fue un hasta luego.
SEGUNDO ROUND
Después de transcurrir algunos meses, "vuelve el perro arrepentido, con el rabo entre las patas, con el hocico partido.." ; a pesar de salir de una relación fugaz con la señorita "amiga de infancia", la señorita "ilusionada de un bodrio de chico" aceptó disculpas del susodicho; además entregó su corazón, su razón y su pasión. Si fuera tan fácil olvidar los momentos dolorosos y a quienes los provocan, muchas chicas no estarían solas, muchas no odiaríamos a algunos cuantos patanes, ellos no serían retirados de algunas propiedades como perros sarnosos, ellos no volverían como recitó "el chavo" tantas veces... "vuelve el perro arrepentido...", pero la realidad es otra, olvidar es tan difícil como caer de un décimo piso y vivir para contarlo. Cómo una predicción, así resultó lo antes dicho para la ilusa, el miedo a ser burlada una vez más, no le permitió confiar, ¿y a quién sí? es lógico reaccionar de esa manera después de haber derramado lágrimas por la debilidad de un niño que no controla sus hormonas. Obviamente, a nadie le gusta ser tratado como un delincuente que debe ser vigilado para que no vuelva a delinquir; ella prefería que se mantuviera alejado de su entorno social, especialmente de sus amigas, vale la pena agregar que el 90% de ellas, si es que no todas, habían transitado por ese parque, llamado "niño que no controla sus hormonas". Sí, chicas, a parte de infiel, recorrido. Ella terminó por ahogarse en los celos; él, por asfixiarse del control .Y una vez más se dijeron adiós, un breve adiós.
TERCER ROUND
Nuestra señorita "ilusionada de un bodrio de chico" sufrió de lo que conocemos como "presión de grupo"; al parecer, el señor "bodrio de chico" simpatizaba en demasía a su familia y al no verlo pararse por su hogar, empezaron las preguntas: ¿por qué no viene? ¿por qué no lo invitas a comer? ¿cuando va a venir?. Dichas interrogaciones solo atormentaban la mente de alguien que, por fin, solo quería decir "delete" y borrar todo lo vivido. De esa manera, ella cedió ante las tentaciones, pues él insistía volver, una vez más. Otra vez juntos, en el momento en el que todo prometía, en la mente fantasiosa de una mujer que solo quiere sentirse amada, ser felicidad. Transcurrieron meses de alegría y mucho amor; sin embargo, siempre algo no encajó. Él, otra vez, distanciado de su entorno, debido a la rutina que los invadió: Dedicados plenamente a la pareja, no dejaron tiempo para disfrutar de manera independiente. Se esclavizaron uno al otro, convirtiendo los momentos juntos en repetitivos y nada esperados. No apartaron espacio para extrañarse y mucho menos para necesitarse. De esa manera, él solo deseaba regresar a lo que era su vida antes de involucrase con ella, amigos, a toda hora; mujeres, todas "putas" sin enamorarse de alguna, alcohol, de manera desmedida; drogas, incluso un poco de eso.
Ese fue el final de una hiriente historia; solo espero, que no exista un cuarto capítulo de algo que no deja de lastimar a los protagonistas. Hay casos en los que el amor no es suficiente; en el camino ya se perdieron muchos otros componentes de una relación y lo que queda de ella solo es un deteriorado recuerdo, que no puede hacer más que guardar los momentos lindos para la prosperidad.
Etiquetas:
amor,
confianza,
ilusión,
INFIDELIDAD,
relación,
rompimiento
Suscribirse a:
Entradas (Atom)